QATAR/REDACCIÓN
Francia derrotó a la sorprendente selección de Marruecos 2-0 y está lista para disputar este domingo ante Argentina su cuarta final en una Copa del Mundo, la segunda consecutiva tras ganar en Rusia 2018.
Los galos quieren sumar el tercer título en toda su historia y olvidar la única final que han perdido ante Italia en el Mundial de Alemania 2006.
Los pupilos de Didier Deschamps quieren romper los 60 años de sequía que lleva una selección sin ser bicampeona del mundo, como lo hizo Brasil en 1958 y 1962.
La primera final que jugó Francia fue en la edición de 1998, torneo en el que fueron anfitriones y se enfrentaron a la poderosa Brasil, que tenía a Cafú, Dunga, Rivaldo y Ronaldo. ‘Les Bleus’ ganaron con autoridad con un doblete de Zidane y uno más de Petit. Con 15 goles conquistaron el primer título en su historia mundialista.
En Alemania 2006, el conjunto galo dirigido por Raymond Domenech perdió en penales ante una poderosa Italia con la que empataron 1-1 en tiempo regular y cayeron 5-3, en donde los grandes protagonistas fueron Zinedine Zidane por el cabezazo a Marco Materazzi.
En Rusia 2018 jugaron su tercera final en tan solo 20 años. En aquella final enfrentaron a Croacia y se impusieron con un marcador de 4-2 en un partidazo con anotaciones de Griezman, Pogba y Mbappé, un gol de Perisic y dos de Mandzukic, quien marcó en propia puerta.
Francia quiere estar en el tercer lugar del top 5 de selecciones con más Copas del Mundo y dejar atrás a Argentina, para tratar de alcanzar a Brasil (5), Alemania (4) e Italia (4).
La selección de Italia fue la primera en ganar la Copa del Mundo en dos ocasiones consecutivas, al conquistarla en su propia casa en el Mundial de 1934, derrotando a la selección checoslovaca 2-1 a la final.
La siguiente cita mundialista se dio en Francia 1938, y la selección Italiana volvió a quedarse con la Copa del Mundo al vencer 4-2 a la Hungría de Ferenc Puskás
La selección de Brasil fue la segunda en conquistar dos títulos seguidos en el Mundial de fútbol. El primero de ellos llegó en Suecia 58. El equipo local fue precisamente su rival, al que goleó 5-2 en la final para conseguir su primer título del mundo, en el debut de un joven de 17 años, conocido como Pelé.
El bicampeonato llegó cuatro más tarde en Chile 62. En la final se toparon con Checoslovaquia, a la que vencieron 3-1 para refrendar el campeonato.